lunes, 13 de abril de 2015

Somos la maquina de impedir?

Ante la desafortunada opinión del Prof. Caucault, respecto de la ONG Alerta Angostura, calificándola como la “máquina de impedir”, declaración que denota, lamentablemente, una profunda carencia de Tolerancia, valor fundamental en cualquier persona que se precie como dirigente político de una sociedad democrática.

Alerta Angostura es una organización civil, que exterioriza críticamente la preocupación de muchos de los vecinos de este municipio, formando parte fundamental del estilo democrático en el que aspiramos vivir.  Las minorías críticas no son un obstáculo para gobiernos democráticos, por el contrario son los mecanismos que tiene la sociedad para controlar los poderes instituidos.

Alerta Angostura pone en cuestión el mega evento de Motocross, y solicita cierta  documentación que no debiera causar ningún inconveniente de poner a su disposición.  Su preocupación es la de muchos vecinos de la localidad.  Quien suscribe también tiene una mirada crítica al respecto, porque más allá del acompañamiento de encuentros deportivos, ningún gobierno municipal  ha presentado una jerarquización de prioridades de las necesidades que afronta la Villa, que a ojo de buen cubero son muchas.  No solo desde un nivel estético sino desde lo estructural y social.

Alerta Angostura es una organización que defiende por sobre toda las cosas la preservación del medio ambiente, es por ello que molesta, es como el tábano en la oreja.  Se preocupa por cuestiones realmente importante, situaciones que afectan directamente al  crecimiento sustentable, que tan sueltos de cuerpo dicen  cuidar.  El Prof. Cacault,  luego de calificar  a dicha organización  como “la máquina de impedir”   enumera textualmente algunos de los impedimentos, de “Alerta”.  Afirma: “…Se opusieron al proyecto del golf, se oponen a la Ruta de Circunvalación, no es ninguna novedad que se opongan…”.

Podemos recordar otros de sus bien acertados impedimentos. La oposición a La cancha de golf que se pretendía construir sobre la banda bosques, el Proyecto de urbanización de las cien hectáreas sobre el Cerro,  ganada en una licitación amañada para  Cerro Bayo S.A., (impulsada por el mal recordado ex-gobernador Sobich),  el proyecto del Casino, la demanda, junto con todo el pueblo, de Angostura sin Camiones, entre tantos otros.

Asimismo cabe destacar que la organización ha instalado  la protección de los Bosques nativos como de interés superior, y no se ha quedado en la crítica estéril.  Presento ante la Cámara de Diputados de la Provincia, un Proyecto de Ley en el cual se establecen principios rectores para el ordenamiento territorial de los bosques nativos.  Alerta Angostura ha  señalado  que en cada una de estas problemática estaba en juego la sustentabilidad del recurso Naturaleza.  Más allá que Cacault  afirme que apuesta al crecimiento priorizando “un desarrollo humano equilibrado con el medio ambiente” no se nos escapa, y la experiencia así  nos lo confirma, que detrás de emprendimientos inmobiliarios, como el impulsado por la empresa Cerro Bayo como intermediario de la empresa Eidico S.A., ubicadas  en áreas ambientalmente sensibles,  primando por sobre todas las cosas  intereses especulativos sin tener en cuenta la fragilidad del suelo y la preservación del medio ambiente.

Los ejemplos de inundaciones, deslave de cerros y bardas parecen que no hacen mella en la Conciencia de nuestros gobernantes.  El ejemplo de lo sucedido en  Neuquén Capital, hace exactamente un año, -entre muchos otros que podríamos enumerar-, parece no servir de ejemplo.  Se hizo uso y abuso de las bardas, se las urbanizó indiscriminadamente, se construyó una pista de motocross depredando la flora y fauna del lugar.  Es más, hicieron oídos sordos a todos los estudios que durante años han realizados docentes de la Universidad Nacional del Comahue.  Las consecuencias fueron desastrosas.

Qué suerte que existe una organización civil como Alerta Angostura.  No es una máquina de impedir sino de Alertarnos de  peligros y consecuencias no queridas.  Si no actuamos responsablemente con un medio ambiente tan frágil, como el de nuestra localidad y si talamos indiscriminadamente el bosque, nos volvemos cada vez más  vulnerables corriendo serios riesgos de inundaciones y deslaves.

Prof. Susana M. Campos

DNI 10.951.217

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